El personal de Stokkermill lo pasó muy bien durante la última edición de Ecomondo, celebrada en Rimini del 4 al 7 de noviembre, donde se expusieron en el pabellón A4 las últimas y más avanzadas tecnologías para el reciclaje de paneles solares al final de su vida útil y sistemas para el reciclaje de baterías de litio.
El evento supuso una oportunidad para conocer a posibles clientes, estrechar lazos con los clientes actuales y recabar información sobre mercados y tendencias.
El reciclaje de paneles fotovoltaicos es un tema de gran actualidad, y Stokkermill lleva años trabajando para definir las mejores tecnologías de recuperación de las distintas fracciones de material que componen estos paneles.
El planteamiento de Stokkermill es sencillo y deliberado, y pretende garantizar la eficacia de los sistemas y una rentabilidad económica equilibrada de la inversión necesaria para construirlos.
Actualmente, la cadena de suministro de reciclaje de paneles solares y fotovoltaicos no está preparada para gestionar el rápido y constante aumento del número de paneles destinados a chatarra, por lo que es necesario que todas las partes implicadas se esfuercen para crear valor a partir de los activos y materiales recuperables.
Las líneas de reciclaje de paneles diseñadas y construidas por Stokkermill minimizan la necesidad de actividades manuales y prefieren utilizar sistemas automatizados que ofrecen una mayor eficiencia en el procesamiento de paneles no estándar o dañados. El sistema más pequeño produce más de una tonelada por hora y hay disponibles sistemas con capacidades superiores.
Otro tema importante es el reciclaje de las pilas de litio procedentes de los RAEE (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos) y del sector del automóvil, para el que Stokkermill diseña y fabrica sistemas de trituración y recuperación de metales y masa negra.
En este contexto, la investigación científica y la experimentación industrial en curso son fundamentales para orientar las opciones y soluciones de diseño. Los materiales son muy heterogéneos, lo que plantea retos complejos que requieren la máxima flexibilidad en el diseño de las plantas de reciclaje. Sin embargo, el reciclaje de baterías de litio es una necesidad esencial que no puede pasarse por alto y debe considerarse una actividad estratégica para la recuperación de recursos raros y valiosos, así como de materiales críticos.
Las plantas de Stokkermill pueden recuperar el electrolito y separar las fracciones metálicas, el cobre y el aluminio de la masa negra para operaciones posteriores de recuperación de compuestos químicos.
El granulador compacto K750, disponible en dos versiones de 5,5 o 7,5 kW, convierte el reciclaje de cables y la recuperación de bebederos en una operación sencilla y eficaz.
El K750 es un granulador compacto con una capacidad de procesamiento de 80-100 kg/h.
El granulador está construido en torno a un bastidor compacto pero extremadamente rígido que aloja la mesa de separación densimétrica. La rigidez del conjunto permite que la mesa funcione con extrema precisión, garantizando la alta calidad del cobre.
El granulador K750 es la máquina más compacta de la gama Stokkermill para reciclar cables y radiadores de cobre y aluminio, con capacidades de producción superiores a 3000 kg/h.
En el ámbito del reciclaje de cables, Ecomondo 2024 supuso una oportunidad para conocer en primicia el revolucionario sistema Mobile M600, que se presentará oficialmente en la próxima edición de ISRI 2025. Se trata de un sistema móvil posicionado sobre una plataforma de 40', con la peculiaridad de estar listo para usar y no requerir ningún trabajo de instalación. Tendrá una capacidad prevista de más de 500 kg/h.
Noviembre de 2024.
